Nacida en San Andrés, Lolia ha desarrollado un trabajo importante de divulgación de la cultura angloafrocaribeña. La actividad cultural que realiza tiene como propósito impedir que desaparezca la tradición de la narrativa oral raizal. Investiga las expresiones de narrativa, cuenta las historias, difunde entre los nativos sus hallazgos y educa a las nuevas generaciones enseñando la riqueza y la vigencia del pasado en el presente de estas expresiones literarias. Coordina programas culturales y participa en concerts, eventos que antiguamente tenían una estructura y unos propósitos comunitarios.
Al igual que su abuelo, continúa la tradición de narradora de historias en un programa radial en el cual presenta a exponentes de la cultura isleña, charla con sus invitados, cuenta relatos y adivinanzas populares, da recetas para platos típicos y presenta música isleña y caribeña, en un esfuerzo por mantener viva la cultura raizal de las islas.
La próxima cosa que quise saber
era qué iba a hacer mi madre con el
cordón umbilical del niño porque, todos
los días, cuando bañaba al niño,
limpiaba el cordón con un pedazo de
algodón. Luego, cuando se cayó el cordón, yo
escuché que le dijo a mi papá: "Tienes que
traer un cocotero joven y fuerte para poder
sembrar el cordón umbilical".
Y pregunté: "¿Sembrar el cordón
umbilical?". Ella contestó: "Sí, siempre que
nace uno de ustedes, sembramos el cordón
umbilical debajo de un cocotero. Envuelvo el
cordón en un pedazo de tela de algodón y le
digo a tu papá que traiga el cocotero. Él va
por el cocotero, cava un hueco y lo siembra
junto con el cordón umbilical". [...] Como yo
necesitaba saber rápido, fui adonde mi
abuelo. Él me dijo: "Cuando se siembra el
cordón bajo un árbol, así como crece el árbol,
alto y recto, así será el hombre o la mujer
sanandresano. No crecerá enfermizo, sino
alto y fuerte, y en la vida será temeroso
de Dios, fructífero y bondadoso, de
espíritu amante con los vecinos y con
todo el mundo". Por eso todo isleño,
tanto de San Andrés como de
Providencia, siembra el cordón
umbilical bajo un cocotero, un árbol de
limón, un árbol de pera u otro árbol
frutal.
"El cordón umbilical y el árbol de la vida"
(Fragmento de Nacimiento,
vida y muerte de un sanandresano)
Ha dedicado su trabajo a la investigación y divulgación de las tradiciones orales del archipiélago, trabajo por el cual ha recibido varias distinciones como el Premio Nacional de Colcultura por el libro Nacimiento, vida y muerte de un Sanandresano” y el premio de literatura por el libro Cuentos de Anansy . Como cuentera ha participado en numerosos festivales tanto nacionales como internacionales donde ha recibido premios por su gran talento para narrar historias. Por las labores desempeñadas en favor de la cultura isleña fue escogida como Mujer CAFAM en el año 2000.